Detrás de cada taza de café que disfrutamos hay mucho esfuerzo. Son jornadas de trabajo en el que las y los agricultores ponen dedicación y cuidados para que se logren la mayor cantidad de cerezas que los cafetales producen. El café es la segunda bebida más consumida en todo el mundo y hoy te vamos a contar del origen del delicioso café que puedes consumir en Toks, la cadena de restaurantes que impulsa proyectos productivos para brindar empleos a las comunidades rurales con lo que contribuye a mejorar los medios de vida de sus pobladores.
En la frontera de México con Guatemala se localiza el volcán Tacaná “Casa de fuego” en lengua mame, una de las últimas comunidades originarias que aún persisten en esta región. Esta reserva de la biósfera fue declarada por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas de México (CONANP) en 2003. Es el último punto al sur de la Sierra Madre de Chiapas, en donde habitan especies emblemáticas como el jaguar y el quetzal. A su vez, es el inicio de la Cordillera Centroamericana una región montañosa que inicia en México y termina en Panamá. Es a las faldas de este majestuoso volcán activo que habitan comunidades cafetaleras que se han comprometido, con su trabajo, a la conservación de esta reserva de la vida.
Uno de estos grupos es el conformado por los Productores Orgánicos del Tacaná, una cooperativa de 150 productoras y productores de 12 comunidades cuyos cafetales se encuentran a una altura de 1,800 a 2,000 metros de altura sobre el nivel del mar dentro de la Reserva de la Biósfera Volcán Tacaná. Este grupo de caficultor practica actividades de conservación y aprovechamiento sostenible de los recursos naturales, con lo que mantienen el rendimiento de los cultivos y, gracias a la promoción de una comercialización justa, se busca incrementar la estabilidad económica de los y las productores de estos granos de café.
Para los productores cafetaleros del Tacaná, el cultivo del café es un oficio desde la cuna ya que el conocimiento es transmitido de una generación familiar a otra. Sin embargo, esta actividad productiva mantiene fuertes retos a consecuencia de la deforestación y el cambio climático ya que continuamente se enfrentan a impactos como inundaciones, erosión de los suelos y plagas, entre otros, lo que merma el rendimiento de este cultivo.
Preocupados por mantener sus medios de vida y tradición, los Productores Orgánicos del Tacaná, han recibido apoyo de Rainforest Alliance, USAID, Fundación Gigante e Hivos a través de su plataforma SAFE, para fortalecer sus capacidades en agricultura climáticamente inteligente y mantienen actividades de reforestación y restauración de los suelos de la zona.
Además, en la búsqueda de mostrar la trazabilidad de las prácticas encaminadas hacia la sostenibilidad que esta cooperativa implementa, 86 hectáreas de estos cultivos cuentan con la Certificación de Agricultura Sostenible Rainforest Alliance con la que mantienen estándares que promueven prácticas agrícolas más sostenibles y acciones que mejoren los medios de vida de las y los agricultores y trabajadores, propiciando que la gente y la naturaleza prosperen en armonía en esta región chiapaneca.
El café que producen los Productores Orgánicos del Tacaná cuenta con las particularidades de ser cultivado en tierras altas y con suelo volcánico, aprovechando estos beneficios que el volcán les brinda. Además, gracias al manejo forestal que realizan, es un cultivo de sombra, lo que se refleja en más sabor y más aroma.
Resaltando lo anterior, la cadena restaurantera Toks impulsa la comercialización de este café producido por la cooperativa para que puedas disfrutarlo en sus restaurantes, como parte de su iniciativa de proyectos productivos que beneficia a comunidades rurales.
Ahora bien, ¿se te antoja un café del volcán? #ConoceCambiaComparte
